Kitten, feliz navidad y año nuevo. Espero con todo mi negro corazón que esta año sido un buen año para ti, y si no lo fue, al menos ya se acabo y podemos tener la sensación de empezar de nuevo.
Cómo dice el título, el blog, o para ser más precisa, las redes sociales del blog entrarán en una especie de hiatus.
Estoy escribiendo este post a inicios de diciembre y si ya de por sí sé que estás fechas son difíciles para mí, son, irónicamente, situaciones externas que me están obligando dejar de compartir cosas contigo. Ahora estoy pasando por una situación complicada emocional por motivos externos y desde ahora sé que probablemente no mejorará por arte de magia.
Y al menos que la magia en realidad exista, nunca verán este post jajaja.
Como dije, serán las redes sociales las que estarán descansando por un par de semanas o un mes, no compartiré noticias seguido por ahí, estoy dejando varias entradas programadas, por lo que el blog en teoría no estará abandonado, si me organizo bien, hasta mediados de Febrero habrá contenido.
Este descanso es una necesidad de cuidar de mi salud emocional, y por primera vez tengo una razón factible que nadie dirá "ya no estés triste" y curarme mágicamente 😂
Es triste que la única forma en que tu salud emocional es tomada en serio es solo cuando estás tirada en el piso sangrando tu muerte a la vista de todos tratando de pretender que no pasó nada.
Debemos cambiar eso kitten, y si tú, como yo, pasas por momentos donde sientes que la vida es demasiado y en teoría no tienes una razón que mostrar a los demás del porqué te sientes así, kitten, yo te apoyo si quieres dejar ir algo y cuidar de ti, porque lo más importante en tu vida eres tú y tu salud física y emocional.
Lo que intento decir con todo esto es, no esperes hasta que algo malo pase en tu vida para cuidar de ti, porque aunque hay días en que no lo parezca, realmente eres valorad@ en el mundo, kitten.
Sin más cosas sombrías, Feliz navidad, que tengas un gran inicio de año, así no avancemos mucho en los meses que vienen, al menos sabemos que realmente lo intentamos, y no hay nada más importante que eso.