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En mi interminable búsqueda de no aburrirme y que no sea del todo muy... cómo decirlo ¿Manoseado? ¿Extremadamente pop? y saltando de link en link (sobre todo esto último porque estaba leyendo post sobre Dylan Farrow), me interesé en esta serie que pasó desapercibida en mi lectura rápida de titulares en las mañanas. Pensé que era una película o un mash-up de títulos y lo dejé de lado, pero, el sábado, no recuerdo en qué blog, mencionaban que esta serie quizá sea el paso definitivo de Amazon como competencia, en producción de series online, a NeFlix
Cuando te dicen serie musical, al menos en mi caso, es difícil no pensar en Glee (serie de la cuál, digan lo que digan, sigo siendo muy fan #Gleek), aunque quizá se vaya un poco la idea preconcebida cuando leemos los siguiente del título "Sex, Drugs, and Classical Music", que sería el nombre completo del libro en el que está basado. Otra adaptación, más, sí.
En este piloto seguimos la historia de Hailey, intentando conseguir un puesto en la sinfónica de Nueva York y de Gustavo, el nuevo y excéntrico director de orquesta. La historia es sencilla, con unos cuantos clichés que se pueden esperar, llevado de una manera bastante simpática, acompañado de mucha buena música. En lo personal es el sueño que todo músico frustrado tiene en su vida: vivir al menos de manera indirecta lo que sería ir Jullliard o ser un músico desempleado en Nueva York, hay cierto romanticismo* en ser músico desempleado (claro, que todo lo romántico se va cuando tienes que pagar las cuentas a final de mes, pero bueh). Y con romanticismo me refiero al idealismo, no a cosas cursis o la palabra con A. *Para más referencia en Wikipedia
Algo que me gustó mucho fue el cameo del violinista Joshua Bell, me llevó más o menos unos 10 minutos de fangirleo gritando "¿ES ÉL? ¿ES ÉL? ¿ES ÉL?", si es que se están preguntando por qué, es que si desde el inicio tiene un cameo así de grande, las probabilidades que Lindsey Stirling o 2Cellos quizá alguna vez hagan una aparición sea más posible. Soy una gran fangirl de los instrumentos de música clásica usados en música moderna.
¿Algo malo en esta serie? No me gustó del todo el estereotipado que se le dió al personaje de Gael García Bernal [Gustavo], su personaje es el típico Latin-Lover que ves en las comedias, eso no me gustó. En los 29 minutos que duró este piloto, hubo una gran cantidad de mistura racial, y solo el de Bernal fue el más... ¿típico? No encuentro la palabra, pero vamos, esa forma de caricaturizar a los latinos no me parece divertido, y aun con todo eso, logró ser un personaje bastante atrapante.
Otra razón para ver la serie es Peter Vack, hace de un bailarín de ballet bastante sexy. Aún no lo he visto bailar, así que espero le den luz verde a la serie y tenga más capítulos. Y si no shipeas Joshua & Hailey, estás bien mal
La serie se transmite en streaming exclusivamente por Amazon, no hay noticias de más capítulos, al menos hasta ahora que termino de escribir el post. De verdad me gustaría que hayan muchos, MUCHOS más capítulos.
Mira el piloto y dime que tal, solo son 29 minutos que, te soy sincera, no te vas a arrepentir.
Sexo, drogas y música clásica ilustran lo que sucede detrás de las cortinas de la sinfonía puede ser tan fascinante como lo que ocurre en el escenario.
Cuando te dicen serie musical, al menos en mi caso, es difícil no pensar en Glee (serie de la cuál, digan lo que digan, sigo siendo muy fan #Gleek), aunque quizá se vaya un poco la idea preconcebida cuando leemos los siguiente del título "Sex, Drugs, and Classical Music", que sería el nombre completo del libro en el que está basado. Otra adaptación, más, sí.
En este piloto seguimos la historia de Hailey, intentando conseguir un puesto en la sinfónica de Nueva York y de Gustavo, el nuevo y excéntrico director de orquesta. La historia es sencilla, con unos cuantos clichés que se pueden esperar, llevado de una manera bastante simpática, acompañado de mucha buena música. En lo personal es el sueño que todo músico frustrado tiene en su vida: vivir al menos de manera indirecta lo que sería ir Jullliard o ser un músico desempleado en Nueva York, hay cierto romanticismo* en ser músico desempleado (claro, que todo lo romántico se va cuando tienes que pagar las cuentas a final de mes, pero bueh). Y con romanticismo me refiero al idealismo, no a cosas cursis o la palabra con A. *Para más referencia en Wikipedia
Algo que me gustó mucho fue el cameo del violinista Joshua Bell, me llevó más o menos unos 10 minutos de fangirleo gritando "¿ES ÉL? ¿ES ÉL? ¿ES ÉL?", si es que se están preguntando por qué, es que si desde el inicio tiene un cameo así de grande, las probabilidades que Lindsey Stirling o 2Cellos quizá alguna vez hagan una aparición sea más posible. Soy una gran fangirl de los instrumentos de música clásica usados en música moderna.
¿Algo malo en esta serie? No me gustó del todo el estereotipado que se le dió al personaje de Gael García Bernal [Gustavo], su personaje es el típico Latin-Lover que ves en las comedias, eso no me gustó. En los 29 minutos que duró este piloto, hubo una gran cantidad de mistura racial, y solo el de Bernal fue el más... ¿típico? No encuentro la palabra, pero vamos, esa forma de caricaturizar a los latinos no me parece divertido, y aun con todo eso, logró ser un personaje bastante atrapante.
Otra razón para ver la serie es Peter Vack, hace de un bailarín de ballet bastante sexy. Aún no lo he visto bailar, así que espero le den luz verde a la serie y tenga más capítulos. Y si no shipeas Joshua & Hailey, estás bien mal
La serie se transmite en streaming exclusivamente por Amazon, no hay noticias de más capítulos, al menos hasta ahora que termino de escribir el post. De verdad me gustaría que hayan muchos, MUCHOS más capítulos.
Mira el piloto y dime que tal, solo son 29 minutos que, te soy sincera, no te vas a arrepentir.
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